Espacio de Salud
Porque nuestra parcela nos nutre lo necesario para vivir en plenitud: agua, sol, naturaleza, tranquilidad y cobijo.
Espacio de Salud
Ubicado en la ladera de la montaña, este rincón de bienestar es un verdadero regalo de la naturaleza y de una energía ancestral. En el corazón del místico Valle de Elqui, una tierra de tradición milenaria y misticismo, nos rodea una naturaleza salvaje con montañas que superan los 3000 metros. Aquí, el sol nos acaricia con su cálido abrazo la mayor parte del año, y al caer la noche, la magia de un cielo estrellado sin igual te envuelve.
He encontrado y sigo encontrando una profunda felicidad al vivir en armonía con el arte y la naturaleza, haciendo lo que amo en este paisaje nortino que aún se viste de verde gracias a sus ríos. Los veranos, calurosos, se vuelven apacibles gracias a la refrescante brisa, mientras el querido río Cochiguaz susurra a lo largo del valle. Aunque el invierno trae un frío intenso y ocasionales lluvias y nevadas, el resto del año nos deleitamos con la abundante luz solar. Este es el lugar donde la armonía, la fuerza de la naturaleza y la magia del clima elquino se unen, invitándote a ti también a conectar con tu propio bienestar y la esencia de este lugar.
Más que un lugar, una forma de vivir…
¿Por qué Espacio de Salud? Porque nuestra parcela nos nutre de lo necesario para vivir: agua, sol, naturaleza tranquilidad y cobijo.
Agua Pura
Nuestro compromiso con la naturaleza se manifiesta en cada detalle. Utilizamos Agua Pura y cristalina directamente de las montañas, un tesoro vital. Contamos con más de 50 árboles frutales y un bosque de espinos en crecimiento, una especie nativa en peligro de extinción, que cuidamos con dedicación.
Cultivamos también una amplia variedad de hierbas aromáticas y medicinales, con las que elaboramos artesanalmente nuestros productos.
Estamos profundamente agradecidos con esta tierra que nos nutre, nos alimenta y nos mantiene sanos, permitiéndonos compartir su abundancia contigo.
Somos Sustentabilidad
Bajo los principios de la Permacultura, vivimos una ética de respeto por la Tierra. Cuidamos cada ciclo natural, alimentando el suelo con materia orgánica, abono de guano y compost elaborado con nuestros propios restos vegetales.
No utilizamos fertilizantes ni herbicidas químicos. En cambio, recuperamos el terreno con bancos de tierra de hoja, cooperando activamente con la tierra para que nos ofrezca alimentos auténticos y saludables.»